Tercera victoria consecutiva del Xeneize. Se afianza en la lucha por entrar a la Sudamericana, y encima, este resultado decretó el descenso del Albo a la B Nacional. Y sin Riquelme, lo cual es noticia.
El PT fue muy aburrido y con muy pocas llegadas. La más clara, fue un derechazo potente de Gigliotti que se estrelló en el palo. En el complemento, salieron con todo. Enseguida, Colazo metió un centro, falló Cambiasso y el Burrito Martínez lo aprovechó para el 1-0. Pero al toque, empató Calleri (de quien Boca tiene el 30% del pase) y le anularon un gol a Casteglione por un supuesto offside. En los primeros ocho minutos pasó de todo.
Pero a este equipo de Bianchi (el de estas últimas fechas) lo que le sobra es actitud y ganas de ir al frente. Enseguida el Burrito hizo el segundo: recibió en el vértice del área grande, sobre la derecha, enganchó para la zurda y sacó un remate bárbaro que se coló en el ángulo derecho de Cambiasso. Gol a lo Messi. El arquero local tuvo mucho que ver en el resultado: de no ser por sus atajadas, Boca hubiera goleado y no hubiera demorado tanto en definir el partido. Hasta que Gigliotti, de tanto ir y machacar, puso cifras definitivas con un frentazo cruzado. El local se jugó la vida en todo momento, pero no pudo torcer el cruel destino que desemboca en un descenso que era cantado.
Boca volvió a ganar, y a falta de dos fechas, está a cinco unidades de los líderes con seis en juego. El campeonato es una quimera, pero no la Copa Sudamericana, de la que cada vez está más cerca.
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