En vísperas de la final vs Tigre, Gustavo Alfaro sigue jugando al misterio. Maneja dos probables esquemas: una con línea de tres y otra con línea de cuatro. Con línea de tres sería: Andrada; López, Izquierdoz, Alonso; Buffarini, Campuzano, Capaldo, Más; Tevez, Zárate; Benedetto. Y con el esquema clásico optaría por: Andrada, Buffa, López, Izquierdoz, Más; Campuzano, Capaldo; Villa, Tevez, Zárate; Benedetto. No se sabe qué sistema táctico plantará mañana en el Kempes. Lo concreto es que el colombiano y el juvenil conformarán el doble cinco alternativo ante las obligadas ausencias de Nández y Marcone. El juez será Néstor Pitana.
En cuanto a los rumores de refuerzos, además la posible vuelta de Ever Banega, suena con mucha fuerza Matías Silvestre, que tiene 34 años y ha tenido mucha continuidad en el Empoli italiano, donde perdió la categoría. Si se va Benedetto (que tendría ofertas) el apuntado es Guido Carrillo, que actualmente juega a préstamo en el Leganés y ya había estado en carpeta cuando se concretó la llegada del Pipa: su pase pertenece al Southampton inglés. Maxi Meza vuelve a estar en el radar (Alfaro lo pidió expresamente y lo conoce, ya que lo dirigió en Gimnasia) pero no sería fácil su llegada, ya que el club debería hacer una costosísima inversión. Por otra parte, el Flaco Andrada renovó su contrato hasta 2023 y le aumentaron la cláusula de rescisión a 25 millones. Es un hecho que seguirá en el club, por lo menos hasta fin de año.
Quiero darle una vez más mi apoyo al plantel y mis palabras de aliento. Sabemos que nos ha costado muchísimo llegar a la final de esta Copa. Que sintieron el trajín de partidos. Pero llegamos porque tuvieron unos huevos gigantes para bancarse las ausencias, a pesar de algunos rendimientos individuales no convincentes. Mañana es una gran oportunidad de sumar un título más en un semestre que ha sido muy bueno sobre todo en cuanto a números. Después llegará el momento de ver quién se queda, quién se va y quiénes llegarán, porque necesitamos refuerzos, pero en eso se pensará a partir del lunes. Ahora hay que enfocarse en ganarle esta final a un muy buen equipo, que pese a perder la categoría, hoy está jugando un poco mejor que nosotros. Pero no importa. Dejando todo en la cancha y sin regalar nada, podemos ganar. Y a Alfaro y a su cuerpo técnico le agradezco y valoro enormemente su trabajo desde que arrancó el año, al margen del resultado de mañana. Desde levantar el ánimo de un plantel golpeadísimo hasta inyectarles un espíritu y dosis de generosidad que no tenían antes, pasando por tener que cubrir ausencias muy importantes por culpa de algunas lesiones. Yo sé que con refuerzos, en el próximo semestre podemos dar que hablar mucho más. Mucha suerte mañana, dejen todo en la cancha que el aliento nuestro será infaltable en cada rincón de la República Argentina y en todas partes del mundo. Porque nosotros alentamos siempre, no como otros...estoy orgulloso de estar de este lado. Quiero que se repita la imagen del 2008 (aunque esta vez si perdemos los campeones son ellos, ja) ¡VAMOS BOCAAAAAAAAAAA!
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