lunes, 14 de octubre de 2013

Boca 1- Rosario Central 1

De la euforia por el triunfo Monumental a la desazón por empatar de local, y encima casi despedirse del campeonato. El Xeneize no pudo con un Canalla que jugó con grandeza y quedó lejos de Newell´s.

Los de Russo arrancaron mejor, y tuvieron un par de aproximaciones muy serias al arco de Trípodi. Pero a los 13 minutos, en una contra, llegó la apertura del local: S. Miño le ganó la pelota a Encina (que la perdió tontamente), comandó la contra a pura velocidad y tocó al medio para Gigliotti. El Puma, que está en racha, desde la medialuna sacó un derechazo bajo, potente y esquinado que esterilizó la inútil estirada de Caranta. Con el 1-0, daba para pensar que Boca se despertaría.

Pero esto no sucedió. En Boca, sólo Riquelme aportó cierta claridad cuando zafaba de la pegajosa marca de Ballini, y fue el único que intentó romper con algún pase entre líneas para que pudieran aprovechar sus compañeros. De hecho, los mejores momentos del local se dieron cuando la globa pasó por los pies del 10. Central contrarrestaba con el fútbol atrevido del pibe Carrizo y la insoportable exigencia del Chino Luna, a quien sólo le faltó estar certero frente al arco.

En el ST, Boca pudo liquidarlo enseguida con un mano a mano de Gigliotti tras un pase genial de Román, pero se lo frustró Caranta. Y enseguida, Bianchi hizo un cambio incomprensible: Bravo (volante central) por el Burrito Martínez. Insólito por donde se lo mire. Había que liquidar el pleito y le quitó una preocupación al equipo de Russo. Eso no hizo otra cosa que agradar al Canalla, que jugó con un orgullo y con un pundonor notables, como lo marca su rica historia. El DT que fuera campeón de la Libertadores 2007 con el Xeneize metió un cambio que le dio réditos: el Loco Abreu, con sus casi 37 años a cuestas, ingresó por el Chino Luna, y también su corajeada incluyó al peligroso enano Niell. Se acercó cada vez más a Trípodi, y después de la interrupción por los cantos locales contra River, Boca ya no tuvo reacción. Se abroqueló atrás, y después de un par de jugada fortuitas, en las que el empate Canalla se asomaba (frentazo de Niell en el palo), llegó a los 44 minutos: tras un rebote, Abreu le dio al arco, y tras un rebote se metió adentro. Delirio del "Palermo" uruguayo, y justo premio para Central, que no merecía irse con las manos vacías.

En el descuento largo de 8 minutos, el Xeneize intentó, pero jugó tan desordenado que no generó ninguna clara frente a Caranta. El equipo visitante casi lo gana con otro remate de Abreu, pero Trípodi evitó otro delirio del Loco y la derrota.

Finde negro para Boca. Jugó mal, le empataron sobre la hora, y encima ahora quedó 6 unidades abajo de Newell´s, que derrotó a River y se va derecho al bicampeonato. La sensación es que ayer el Xeneize se despidió de la lucha, más allá de que las matemáticas alcancen. Porque si querés ser campeón, estos partidos debés ganarlos con autoridad, y no ser tan timorato, más jugando de local.

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