Tras la eliminación en la Libertadores, el conjunto de Bianchi, por más que jugó mejor, no pudo con Vélez.
El local arrancó mejor, pero cumplido el cuarto de hora, tras una falta tonta de Caruzzo a Pratto, el Pocho Insúa clavó la pelota en el ángulo superior izquierdo de Orión, que nada pudo hacer. No obstante, el equipo de Gareca no le daba muchas complicaciones a la defensa, mientras que Sánchez Miño era cada vez más imparable para Cubero y compañía. Se asociaba con Clemente y Erviti, y de una combinación entre los tres, llegó el merecido empate: pisadita del pibe ante Cubero, apertura al 3, centro del incansable 11 y cabezazo perfecto, cruzado, de Nico Blandi. El local casi consigue la ventaja antes del descanso, pero Sosa le tapó un derechazo cruzado a Marín.
En el ST, Boca siguió intentando y generó situaciones como para ganar el partido, pero no estuvo fino en la definición. De la mano de S. Miño, generó quizás el mejor fútbol de lo que va del torneo. Aunque Vélez también tuvo sus opciones de contra, y tuvo que aparecer Orión para ahogarle el gol a Insúa y Pratto. El juego terminó con la expulsión de S. Miño por un codazo. Maglio lo echó bien, pero debió haber echado a Cubero antes, por otro codazo al pibe xeneize.
Terminaron 1-1 y ninguno se pudo reivindicar del pobre campeonato que están teniendo. Boca sigue anteúltimo, aunque mostró una mejor cara con su base titular, y mereció el triunfo. Vélez se prepara para la final del 30 de junio ante el ganador del Final, que por ahora es Newell´s.
No hay comentarios:
Publicar un comentario