Y un día volvió a la victoria. Tras las dos derrotas consecutivas ante River y Central, el conjunto de Bianchi goleó al Tomba y tendrá una semana de paz, por fin.
El partido lo abrió enseguida. A los 8 minutos, Riquelme le puso una bola genial al Burrito Martínez y el arquero Carranza se lo llevó puesto. Penal que el 10 cambió por gol. Después, Boca se retrasó peligrosamente y le cedió terreno y pelota a un Godoy Cruz que, si ganaba quedaba puntero del campeonato. Claro que exigió muy pocas veces a Orión, no generó peligro.
En el complemento, de movida entró Erbes por un cada vez más inexpresivo Gago, y enseguida, en el momento menos pensado, clavó el segundo: Forlín salió jugando y se la dio a Martínez, con todo Godoy Cruz jugado en ataque. Éste habilitó a Gigliotti, quien (ayudado por Carranza, que le regaló todo el arco) eludió al golero mendocino y decretó el 2-0.
A partir de ahí, el partido fue otro. Boca impuso el ritmo de la mano de Riquelme y hasta se floreó, generando varias chances claras. Restaba el tercer gol: Carranza cometió otro penal (esta vez a Colazo, de muy buen partido), lo echaron y el 10 se lo cedió al Puma, quien no falló. 3-0. No había tiempo para nada más.
Boca volvió al triunfo, y en este campeonato de locos, se ubica seis unidades abajo de los punteros Colón y San Lorenzo, que serán sus próximos rivales. Obviamente, no muestra cosas de un equipo campeón, pero si lograse ganar tres partidos seguidos, todo puede pasar en este loco fútbol argentino. Mientras tanto, tendrá paz hasta el domingo. Y eso no es poco, para nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario