El equipo de Bianchi dejó escapar el último tren para pelear el título y no pudo con el Sabalero.
No hay mucho para rescatar del partido. Colón, un equipo muy consciente de sus limitaciones, planteó dos líneas de cuatro combativas y apostó a no perder. Es lógico, está peleando por no descender. Y Boca no supo quebrarlo, por falta de fútbol, y también por falta de actitud de algunos de sus jugadores, como Gago y Sánchez Miño. El equipo de Bianchi generó más peligro en el ST con el ingreso de Acosta, pero no tuvo punch arriba, ni ideas futbolísticas concretas. Eso sí, a lo último no le cobraron un penal grande como una casa por un manotazo de Sosa ante un tiro libre de Colazo. El local casi no exigió a Orión. Resignó el liderazgo del torneo, pero sumó un punto que le sirve en su lucha por la permanencia.
A Boca sólo le queda clasificar a la Copa Sudamericana. Después, deberá haber una limpieza a fondo.
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