En la primera mitad Lanús dominó a voluntad y ganaba 1-0 con gol de Fernández Di Alessio, ante un Boca atado e impreciso, que sentía la ausencia de Juan Román Riquelme, lesionado por un esguince en su rodilla. Y prácticamente no pateó al arco. Esto motivó a Carlos Bianchi a despertarlos en el entretiempo "les dije que en el primer tiempo no habíamos jugado a nada". Y en el complemento, la historia fue otra.
Boca salió como una tromba: a los 50 segundos Guillermo Barros Schelotto ejecutó un tiro libre en forma de centro, Walter Samuel cabeceó al travesaño y Martín Palermo la empujó también de cabeza. a los dos minutos, el Guille hizo la individual y asistió al Loco que la picó ante la salida del arquero. A los 23, llegó el hattrick del Titán, en otro mano a mano y esta vez con un zurdazo potente tras una patriada colosal de 70 metros del Negro Ibarra. Y antes del cierre, Guillermo puso cifras definitivas con otra apilada, esquivando al Negro Roldán y a Cravero y definiendo cruzado y fuerte. Una actuación fenomenal de la dupla de oro de Boca de esos tiempos.
Boca no pudo lograr el tricampeonato local en ese Apertura 99. La gloria quedó en manos del eterno rival. Pero ese partido quedará en la memoria de muchos como uno de los mejores de la primera era del Virrey.
Boca no pudo lograr el tricampeonato local en ese Apertura 99. La gloria quedó en manos del eterno rival. Pero ese partido quedará en la memoria de muchos como uno de los mejores de la primera era del Virrey.
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