Boca 0- Talleres 1

 Inesperada derrota. A menos de sos semanas para los octavos de final contra Inter, el equipo de Miguelo hoy dejó su invicto en este 2020. Con una pálida imagen y casi nada para rescatar. No diría que preocupa, pero sí es un duro llamado de atención. 

De movida, Tevez podría haber sido expulsado a los cinco segundos por un planchazo a Retegui, pero Delfino, de mal arbitraje, lo perdonó. Fue malísimo el primer tiempo, sin rebeldía, sin la intensidad de otras veces (a excepción de Capaldo que nunca te deja a gamba), inconexión, imprecisión...Maroni fue titular y dejó pasar una chance de oro. En la primera parte, sólo hubo un cabezazo de Soldano que desvió Caranta. Muy pobre. 

En el segundo tiempo parecía que Boca se despertaba y empezó a apretar más a la T, pero con pocas ideas, el mejor otra vez sin dudas fue Carlitos, que con su claridad intentaba profundizar. Villa tuvo una chance que le tapó el arquero, pero poco más. Soldano sigue a contramano e ingresó Wanchope, pero tuvo tres y definió tarde porque lo cerraron. Ahora, lo de Miguel fue raro. Promediando el complemento metió a Obando y a Wanchope y después no hizo ningún cambió más. ¿Qué le pasó? Teniendo tres cambios más para hacer, no intentó siquiera meter a Mauro para que se muestre, o al Pulpo González que necesita ritmo para llegar bien a la Copa tras lo que pasó con Pol Fernández. Así como acertó muchas veces hoy se equivocó feo. El resto lo hizo el ladrón de Delfino, no cobrando una clara falta a Villa que derivó en el contragolpe y el gol de Joel Soñora, el hijo del Chiche que fue descartado hace años en las inferiores del club. Ese tipo no puede dirigirnos más después de haber confesado el robo del 2015, Saben que es gallina y nos sigue cagando. Después del gol Boca terminó con 9 por las expulsiones de Obando e Izquierdoz.

En fin, es un duro llamado de atención. Talleres ahora quedó primero en el grupo de la Copa con siete puntos y ahora Boca deberá recibir a Lanús el próximo viernes pero ya con la cabeza en Inter. Seguramente no jueguen todos los titulares. Los que esperaban que perdiéramos para criticar seguro están felices, los supuestos hinchas y la corpo. Pero prefiero perder ahora. Eso sí, habrá que corregir errores. Pero un tropezón no es caída, alguna vez iba a pasar. Vamos Boca!!!

La Nación