Qué feo perder estos partidos...por favor. Contra estos equipos que cuentan las monedas. Sería fácil para mi decir que no merecimos perder, pero si perdimos es porque defendimos como el culo y no tuvimos eficacia. De todas formas, no le echo la culpa a nadie. No estamos hablando de falta de actitud o falta de huevos, Boca afrontó el compromiso como se debe, pero no tuvo una buena noche. Y cuando eso pasa, es muy jodido.
A Boca le costó el primer tiempo. No se mostró firme atrás y dio ventajas. Tampoco generó mucho, aunque tuvo sus chances: Ramírez se perdió dos chances claras. El más peligroso fue el Changuito, que hizo un zafarrancho por la izquierda cada vez que pudo. Varela, poco participativo, lo rodearon bien y pocas veces pudo ser salida. Orsini por derecha hizo lo que pudo, pero no gravitó.
En el ST el Xeneize arrancó mejor, incluso tuvo una muy clara (remate de Pol en el larguero tras desborde del Chango) pero se vio sorprendido por el gol de Fernández Metilli tras error del Cali y rebote de Rossi y por un penal que por suerte atajó el arquero. Battaglia mandó a Villa a la cancha y el colombiano volvió a ser de lo más picante: dos remates, uno afuera y otro que el arquero mandó al córner fueron su mejor aporte. También lo tuvo el Pipa con dos cabezazos (uno estando 0-0) y el pibe Vázquez entró al final para intentar salvar las papas. Casi lo logra...pero su zurdazo se fue al ladito del palo. No quiso entrar y perdimos por errores nuestros.
Me rompe las bolas tremendamente perder contra estos equipos que pelean el descenso. Pero hay que dar vuelta la página y pensar en Tigre. Y corregir errores. Nos faltan todavía los jugadores de sus selecciones (sobre todo Advíncula y Romero que son muy importantes). Da bronca porque ganar era quedar puntero con el sorprendente Platense, pero un tropezón no es caída. Una mala noche no me va a cambiar la confianza que se ganó este equipo. Aguante Boca, aguante Román y aguante Battaglia...
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