Boca 1 (1)- River 0 (2)

Sabíamos que sería difícil remontar un 0-2. Que el equipo tenía que hacer méritos futbolísticos de verdad, con buen juego y goles. El temperamento, la actitud, la garra y el esfuerzo no se negociaron. Pero no alcanzó el gol de Hurtado sobre el final y River consiguió el hito que le faltaba: eliminar a su eterno rival en la Bombonera, a diferencia del 2015 cuando se negaron a completar (otro día, por supuesto) los 45 minutos que les faltaron en octavos. Con la inestimable colaboración del VAR, que analiza las jugadas solamente cuando son a favor de ellos (penal de Pinola a Salvio por un codazo al minuto y gol anulado al propio Toto por una mano de Más que para mí es involuntaria). Y el presidente del club del cual no es hincha, siempre en un cumple y nunca ocupándose como corresponde. Gracias a Dios se van en diciembre, o al menos eso espero. Porque la inoperancia y la mediocridad de esta dirigencia, que se jacta de tener superávit mientras ya nuestras vitrinas internacionales tienen telarañas, mientras que las del eterno rival están repletas de nuevos trofeos hizo posible esto. Incapaces de retener jugadores de jerarquía para ganar la Copa (más allá de que en algunos casos se quisieron tomar el palo igual), trayendo a otros que vinieron de paseo (De Rossi y no lo culpo al romano) o que no dan la talla para vestir esta camiseta. Espero que voten con conciencia en diciembre, como ahora el domingo y no nos sigan gobernando estos tipos. Ellos son cómplices de esta racha nefasta contra el eterno rival, porque no hicieron un carajo por evitarla.

No voy a analizar el partido, sólo decir que Boca siempre intentó de pelota parada, que faltó ligar en algunas, como esa que saca Armani cuando era gol en contra de Enzo Pérez, que ellos prácticamente no inquietaron. Pero es una serie que se termina perdiendo por detalles, como el gol que se pierde Capaldo en la ida, poner hoy a dos delanteros que hoy se vio que no estaban para jugar, etc. Defensivamente Boca encontró en López-Izquierdoz una zaga confiable y casi infranqueable y un arquero que siempre aparece, el tema es que en el partido de ida no alcanzó. Pero ellos han sido los mejores de Boca en esta serie. Deben quedarse por mucho tiempo, así como también el técnico, a pesar de los errores cometidos en el Monumental. Hoy se dejó una buena imagen, la deuda es la generación de juego. Se notó mucho que este equipo estaba más diseñado para esperar que para atacar, salvo alguna finta de Salvio. Además Tevez y Wanchope cumplieron su ciclo. Ninguno de los dos estaba para jugar este partido, más allá de sus ganas. Y con la cadena de frustraciones que vienen arrastrando, ya es hora de que se vayan y traigan delanteros de nivel. Que se vayan a jugar al golf o a los recitales de la Mona, pero en la refundación que hay que hacer no deben seguir. Y me importa un carajo que Tevez sea ídolo; no estaba para jugar y hoy quedó demostrado. Después, obviamente que Zárate entró mal, fue muy morfón y no apareció, que el neurótico de Villa desaprovechó una contra ya con el partido 1-0 cuando Salvio entraba solo por el medio casi sin oposición. Hurtado entró con ganas y hasta pescó el gol que nos puso a tiro de los penales. Y claro, después de eso, ellos empezaron a hacer tiempo de manera alevosa, jugando con nuestra desesperación: Armani, Enzo Pérez, el horrible de De La Cruz que vive en el piso, etc. Pero cualquier equipo hubiera hecho lo mismo eh... Y si hubiéramos hecho el gol antes, por ahí les podíamos meter el segundo. Pero bueno...el arbitraje también fue muy malo. Cobró mal para los dos, pero todas las divididas eran para ellos.Y honestamente debo decir que Almendra jugó su mejor partido desde que está en Primera, lejos, para sorpresa de todos. Intentó ser salida, corrió, metió, y nunca se escondió, ni se dejó copar la parada por Enzo Pérez y compañía. Después le tocó salir porque necesitábamos quemar las naves, pero cumplió. Bien por el pibe, que merece unas mínimas disculpas aunque sea...

Me da mucha impotencia que ellos sigan festejando en nuestra cara y ahora en nuestra cancha. Angelici lo hizo posible y sus secuaces nefastos. Pero sigo siendo orgullosamente hincha de Boca que llenó la cancha y alentó en paz, sin agresiones al micro rival como nos hicieron ellos el año pasado. Como corresponde, por otra parte. Aplaudiendo al término del partido. Bancándose la eliminación, como no se la hubieran bancado ellos si perdían una final de local el año pasado. Ellos podrán estar pasando el mejor momento de su historia, ganándo Copas y ganando todos los cruces, pero la pasión que tenemos los bosteros, ellos no la van a tener nunca. Somos muy distintos. Algún día se les va a terminar cuando se vaya Gallardo, se vaya el oficialismo de Boca y se vayan todas las gallinas CORRUPTAS que manejan el VAR y la Conmebol. Al gordo quemero le queda muy poco, merece ser linchado en la plaza pública. De los socios depende no votar en diciembre la continuidad de este modelo que nos llenó de fracasos. Ellos en la ida fueron mejores. Caímos de pie, las buenas ya van a venir...

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