No hay mucho para analizar. Defensa presionó desde el comienzo, con la movilidad de Neri Cardozo, del Uvita Fernández y trató de llegar. Por momentos superó a Boca en el medio con rapidez en tres cuartos hacia adelante y generó algunas posibilidades. Pero a los 19 minutos presionó Hurtado, clarificó Alexis, Zárate peleó la pelota y el rebote lo dejó a Almendra de frente al arco de Unsaín: zurdazo al palo izquierdo y a cobrar. Con la ventaja, Boca no atacó más y le cedió campo y pelota al local, al que le faltó profundidad para inquietar a Andrada y probó mucho desde afuera del área. El equipo de Alfaro sólo tuvo un tiro libre de Mauro que pasó cerca.
En el segundo tiempo ya fue un monólogo del Halcón, que sufrió la impericia de sus delanteros: el Cuqui Márquez se perdió un cabezazo solo contra el Flaco. López e Izquierdoz (gran momento de ambos) rechazaron absolutamente todo y el colombiano Fabra no pasó al ataque ni una sola vez, mientras que Buffarini terminó siendo expulsado por reiteración de infracciones. La verdad, quiero reivindicar al venezolano Hurtado, porque no solamente de una presión suya nacio el gol, sino que no le llegó una pelota como la gente: tuvo que aguantar ladrillazos sin tener opciones para descargar. Yo la verdad que como hincha quedé muy golpeado por la derrota indigna del otro día ante River. Y también estoy desilusionado, porque de dar una imagen de un equipo fuerte, fuimos frágiles como nunca una vez más contra ellos. Siempre sostuve que había que ser un equipo aguerrido y batallador, pero eso no implica no ser más protagonista cuando tenés los elementos como para hacerlo. Ahora, yo pregunto, ¿cómo va a hacer el técnico para dar vuelta un 0-2 siendo más conservador que otra cosa? Está bien, uno supone que siendo locales vamos a ser protagonistas. Pero hay que salir a quemar las naves como nunca Gustavo...y espero que los jugadores también lo entiendan. Hoy por ejemplo Fabra no pasó nunca al ataque. Yo me quejo y reniego de Fabra últimamente, pero no digo que no tenga que proyectarse. Tiene que ir y volver. El único diferente que tenemos hoy es Salvio, que hoy no estuvo ni concentrado vaya uno a saber por qué: si no jugó hoy, menos va a jugar contra Racing el sábado 19, justo antes de la revancha. Lo cuidarán para el 22, aunque llegará sin ritmo. Y es casi el único que desequilibra; hoy Zárate es un desastre, Alexis bajó el nivel y Villa tiene el balde que le regaló Pavón antes de emigrar. Realmente dependemos de un milagro para dar vuelta la serie. Ah, y ni hablar del irresponsable de Wanchope, que se volvió a desgarrar por irse de joda. Ahora tenemos que afrontar la revancha con Soldano o con Hurtado, que son nuevitos. Yo no quiero ser pesimista, pero el panorama es absolutamente desalentador. Y soy realista. Ante un equipo que no te perdona no podemos dar ventajas.
En fin, seguimos en la punta con 21 unidades, aventajando a Argentinos que se ubicó escolta con 18. Seguramente contra Racing jueguen todos suplentes, porque el 22 no se puede fallar. El objetivo del plantel ya tiene que ser ese. Mirando para adentro y haciendo autocrítica, en vez de solamente fijarse en los beneficios que tienen ellos. Dejen todo por los que seguimos alentando, carajo...
Clarín |
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