Mal resultado. Necesitábamos descontar puntos en la tabla para meternos entre los cuatro mejores y no pudimos cosechar más que un empate en Avellaneda. Con la vuelta a la línea de tres, con actitud, pero con escaso volumen de juego, escasa sorpresa y menos peso ofensivo que una pluma, fue empate y seguimos fuera de los cuatro que se clasifican a la definición del torneo.
Fue un partido trabado, luchado y áspero. Boca fue pura voluntad, pero en el arranque se perdió un par de goles que podrían haber cambiado la historia. A propósito: lo que erró Maroni después del rebote en el travesaño lo puedo errar yo con la panza que tengo, no un jugador profesional, eso es inadmisible. Aparte volvió a la versión que tenía antes de su gol a Claypole y los dos a Vélez. Volvé Cardona, por favor...el local sólo complicaba con el Tucu Palacios, que tiró el centro del gol del Rojo, en donde Andrada salió a cazar pajaritos y le regaló el arco a Togni. Como también salió mal en el primer gol de Talleres, en la emboquillada de De La Cruz contra River que salvó López casi en la línea y volvió a salir a cualquier lado en el segundo tiempo de hoy. Hermano, si no tenés más ganas de jugar en Boca, andate ya mismo. Bajaste el nivel hace tiempo, nunca nos salvás en un partido realmente importante y ahora hacés beneficencia con los rivales. Mirá que para tener ofertas de Europa no te conviene mandarte cagadones. Nos regalaste muchas atajadas, pero si no te ponés las pilas vas a terminar en la liga regional de Mendoza. Empezá a volver a respetar el glorioso buzo que llevás puesto, y si tenés tantas ganas de irte pedí que te vendan ahora.
Para el segundo tiempo Miguel metió a los diez minutos a Zárate y Almendra: Mauro entró y metió el centro para el cabezazo goleador del cuestionado Zambrano. Agustín se mostró más movedizo que Maroni y aportó equilibrio, pero no hubo volumen de juego. Capaldo se comió la banda derecha con un despliegue conmovedor (incluso le hacen el foul del tiro libre del empate) pero Tevez se tenía que tirar unos mtros más atrás y perdía peligrosidad. Villa tuvo una noche para el olvido: encaró poco y nada, le ganaron bastante y tuvo la chance de darnos la victoria sobre la hora con el penal que cobró Loustau por mano de Costa. Pero las demoras, las morisquetas y la atajada del arquero Sosa (especialista en este rubro desde que atajando para nosotros nos hizo ganar un par de definiciones por Copa Argentina) y que lo pateó horrible y anunciado, nos privaron de un triunfo que no sé si hubiera sido merecido. Pero al haber tenido más la posesión y el empuje, se podía haber logrado. Nefasta noche del colombiano.
En fin, panorama complicadísimo para Boca en pos de lograr la clasificación por el título, ya que tiene por arriba a Vélez, Lanús, Defensa y el Rojo. En la próxima fecha recibirá al Halcón de Varela, que no será una tarea sencilla. Boca no puede estar afuera de una definición por el título para la que clasifican cuatro equipos. Ojalá nos levantemos.
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| AS Argentina- Diario AS |
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