Boca 2- Quilmes 0

Volvió a ganar el Xeneize. Con una brillante actuación de Riquelme, despachó a Quilmes y llega afilado al Superclásico.

Le costó imponer el ritmo al conjunto de Bianchi. Porque el Cervecero, con sus dos líneas de cuatro, trató de cerrar los caminos para no dejarles espacios a Gago y a Román. Además, a los dos minutos, Ribaír Rodríguez se transformó en el enésimo lesionado y tuvo que ingresar Caruzzo. Pero hubo actitud y deseo de ganar el partido. Riquelme empezaba a aparecer cada vez más seguido, pero costaba penetrar al conjunto de Vivas. Hasta que a los 33 minutos, la inició S. Miño, Román la levantó con zurda y antes de que pique, lo dejó solo a Gigliotti con Peratta. El Puma resolvió bárbaro: con cara externa al segundo palo del arquero.

Con el 1-0, se abrieron los espacios. Gago empezó a aparecer más, y a soltarse mejor. Para el ST, Quilmes tuvo que salir a arriesgar un poco más por la desventaja. Y si bien le dio algún susto a Orión, la realidad es que no lo exigió tanto. Méndez, que jugó de lateral por la lesión de Erbes, cerró muy bien los espacios y se desdobló muy bien para recuperar el balón, y Ledesma fue un muy buen complemento del elegante Gago. Así, el local generó situaciones que no terminaron en goles por la mala puntería (sobre todo la de Martínez en el palo tras un brillante pase del 5). Román se hizo notar con dos asistencias más que no aprovecharon sus compañeros. Fue un excelente partido del 10 en su partido 194 en la Bombonera. Pero recién a los 41 minutos liquidó en pleito: nació en un finísimo quite de Gago, Ledesma que se la devuelve, y el mismo Pintita que abre para S. Miño. El pibe colocó el centro para la cabeza del voraz Gigliotti y chau Quilmes.

Boca cumplió y se mantiene a 4 unidades del líder Newell´s. Ahora, mientras reza para no seguir acumulando lesionados (y espera que se recuperen soldados clave), disfruta de un buen presente (tres partidos al hilo con el arco en cero), a la espera de la visita al Monumental, para seguir con chances en el torneo.