El viernes, Newell´s derrotó 2-1 a Tigre.
El sábado, Belgrano y San Lorenzo igualaron 0-0. Rafaela y Colón, 1-1. Gimnasia le ganó 2-0 a Argentinos en La Paternal, es único puntero, y provocó el descenso del Bicho. Vélez se recuperó y goleó 4-1 a Central. Y Quilmes todavía sueña con la salvación: le ganó 1-0 a Racing en Avellaneda.
Ayer, Godoy Cruz dio el batacazo en La Plata: 1-0 a Estudiantes, quedó segundo y lo alejó del título. Lanús superó 1-0 a All Boys y todavía sueña, ya que debe un partido postergado ante Tigre (juegan el miércoles). Boca goleó a Arsenal 4-2 y se acerca a la Sudamericana. Y River no pudo con Olimpo en Bahía: igualó 1-1 y dejó pasar la chance de quedar líder con el Lobo.
Gimnasia 30; Godoy Cruz, River 28; Colón 27. Arde el torneo, a tres fechas del final.
lunes, 28 de abril de 2014
Boca 4- Arsenal 2
Un concierto de fútbol después de mucho tiempo. Eso se vio ayer en la Bombonera. Boca jugó (sin exagerar) el mejor partido del tercer ciclo de Bianchi y vapuleó al equipo de los ídolos Palermo, el Pato y el Flaco.
Tras un comienzo con reconocimientos (hubo merecida plaqueta para Schiavi) y abrazos varios, entre los que se destaca el de Martín y Riquelme, Boca salió a comerse crudo a su rival, y a los 50 segundos ya estaba en ganancia: Gigliotti asistió a Erbes, el Pichi entró al área y la picó deliciosamente por sobre el cuerpo de Campestrini. El hambre de victoria, la actitud y la intensidad conque salió a jugar el equipo de Bianchi no se alteró ni siquiera con el injusto empate de Echeverría. Siguió insistiendo, generando chances más que claras de la mano de un gran partido de Juan Román Riquelme, que otra vez jugó como para que le renueven el contrato. Jugó e hizo jugar a todos. Tanto Grana y Erbes por la derecha como Insúa y Colazo por la izquierda, fueron una pesadilla para la defensa visitante. Si el 2-1 se demoró en llegar, fue por las grandes atajadas de Campestrini (cabezazo al Burrito Martínez en la línea y mano a mano a Colazo). Pero en el final del primer tiempo, Marcone metió la mano y Ceballos cobró penal. Un penal que Román cambió por gol, y por la justa ventaja, ya que Boca era muy superior.
En el ST, el local siguió yendo al frente y enseguida concretó el tercer gol: Emanuel Insúa metió una pisadita a lo Zidane, y tiró el centro, manoteó Campestrini, y rebotó en la testa de Colazo. Un gol de metegol. A partir de eso, se terminó el partido. Lucianito Acosta entró por Riquelme, y enseguida el chiquilín provocó el penal que Gigliotti transformó en el cuarto gol. El descuento de Furch, tras una siestita de Orión, fue sólo decorativo, Boca aplastó a Arsenal y jugó como hace muchísimo no lo hacía.
Este triunfo lo afianza en la zona de clasificación para la Copa Sudamericana. A falta de 9 puntos por jugar, el Xeneize se ilusiona con la vuelta a un torneo continental. Aún no se sabe qué pasará con Riquelme y con el futuro plantel. Pero sigue sumando, y eso es positivo de cara al futuro.
Tras un comienzo con reconocimientos (hubo merecida plaqueta para Schiavi) y abrazos varios, entre los que se destaca el de Martín y Riquelme, Boca salió a comerse crudo a su rival, y a los 50 segundos ya estaba en ganancia: Gigliotti asistió a Erbes, el Pichi entró al área y la picó deliciosamente por sobre el cuerpo de Campestrini. El hambre de victoria, la actitud y la intensidad conque salió a jugar el equipo de Bianchi no se alteró ni siquiera con el injusto empate de Echeverría. Siguió insistiendo, generando chances más que claras de la mano de un gran partido de Juan Román Riquelme, que otra vez jugó como para que le renueven el contrato. Jugó e hizo jugar a todos. Tanto Grana y Erbes por la derecha como Insúa y Colazo por la izquierda, fueron una pesadilla para la defensa visitante. Si el 2-1 se demoró en llegar, fue por las grandes atajadas de Campestrini (cabezazo al Burrito Martínez en la línea y mano a mano a Colazo). Pero en el final del primer tiempo, Marcone metió la mano y Ceballos cobró penal. Un penal que Román cambió por gol, y por la justa ventaja, ya que Boca era muy superior.
En el ST, el local siguió yendo al frente y enseguida concretó el tercer gol: Emanuel Insúa metió una pisadita a lo Zidane, y tiró el centro, manoteó Campestrini, y rebotó en la testa de Colazo. Un gol de metegol. A partir de eso, se terminó el partido. Lucianito Acosta entró por Riquelme, y enseguida el chiquilín provocó el penal que Gigliotti transformó en el cuarto gol. El descuento de Furch, tras una siestita de Orión, fue sólo decorativo, Boca aplastó a Arsenal y jugó como hace muchísimo no lo hacía.
Este triunfo lo afianza en la zona de clasificación para la Copa Sudamericana. A falta de 9 puntos por jugar, el Xeneize se ilusiona con la vuelta a un torneo continental. Aún no se sabe qué pasará con Riquelme y con el futuro plantel. Pero sigue sumando, y eso es positivo de cara al futuro.
lunes, 21 de abril de 2014
15ta fecha
El sábado, Central y Estudiantes igualaron 0-0, al igual que San Lorenzo- Newell´s. Olimpo derrotó 1-0 a Quilmes como visitante y complicó a los de Caruso.
Ayer, Colón y Belgrano, 0-0. Racing venció 1-0 de visita a Argentinos y lo dejó al borde del descenso. River, por el mismo score, le ganó a Vélez y quedó líder del torneo. Y Boca, también por el mismo resultado, se impuso a Tigre en Victoria y sueña con la Sudamericana. Arsenal, en el debut de Palermo, derrotó 3-1 a Lanús.
Hoy se completó la fecha. Godoy Cruz goleó 3-0 a Rafaela y se puso a dos unidades de la cima. Y Gimnasia hilvanó su 5to triunfo seguido al derrotar 2-1 a All Boys y comparte la punta con los Millonarios.
River, Gimnasia LP 27; Estudiantes y Colón 26; Godoy Cruz 25. Un torneo de locos. Restan doce puntos en juego y hay muchos en la pelea.
Ayer, Colón y Belgrano, 0-0. Racing venció 1-0 de visita a Argentinos y lo dejó al borde del descenso. River, por el mismo score, le ganó a Vélez y quedó líder del torneo. Y Boca, también por el mismo resultado, se impuso a Tigre en Victoria y sueña con la Sudamericana. Arsenal, en el debut de Palermo, derrotó 3-1 a Lanús.
Hoy se completó la fecha. Godoy Cruz goleó 3-0 a Rafaela y se puso a dos unidades de la cima. Y Gimnasia hilvanó su 5to triunfo seguido al derrotar 2-1 a All Boys y comparte la punta con los Millonarios.
River, Gimnasia LP 27; Estudiantes y Colón 26; Godoy Cruz 25. Un torneo de locos. Restan doce puntos en juego y hay muchos en la pelea.
Tigre 0- Boca 1
Vital triunfo. Tras los dos pobres empates consecutivos, el conjunto de Bianchi volvió a la victoria, justamente en Victoria.
Boca no jugó para nada bien. No tuvo fútbol ni peligrosidad ofensiva en el primer tiempo (excepto por el chico Acosta, que pegó un tiro en el palo) y sufrió horrores en defensa. Lo salvó una vez más Agustín Orión, que le tapó un claro cara a cara a Nahuelpán y un tiro libre venenoso a Pérez García. El problema de Boca no está en la defensa, sino en el retroceso, y no lo pagó yéndose derrotado al descanso porque lo que le sobra es arquero. Además, con la salida de Gigliotti, tuvo más anemia ofensiva que la que acostumbra. ¿Qué mérito deportivo hizo Riaño para ser titular? Por favor, es impresentable. No aguanta la pelota, tira masitas al arco y es un autito chocador. Basta de este pibe. Gigliotti es Batistuta al lado de él.
En el complemento, ya Tigre no llegó tanto, pero la falta de fluidez ofensiva y de circulación de Boca, fue exasperante. Para colmo, Bianchi le erró con los cambios, sacando al pibe Acosta (lo mejor del equipo), dejando a Riaño los 90 minutos no se sabe para qué, y metiendo al otro impresentable de Ledesma para sacar a Erbes. Parecía que se moría en un 0-0, porque el local ya no exigió tanto a Orión. Pero...a los 45 minutos, el 10 frotó la lámpara. Riquelme recibió en tres cuartos, apuntó y midió el remate que se clavó a media altura del palo derecho de Javi García, que nada pudo hacer. Justo cuando los dirigentes dudan de renovarle su contrato. No se sabe qué será de la vida de Román a partir de junio. Y es cierto que físicamente ya no es el de antes. Pero todavía puede hacer cosas propias de sus mejores tiempos, como su golazo de anoche.
Boca volvió al triunfo, clave en su lucha para clasificar a la Copa Sudamericana. Está lejos en el torneo, pero el objetivo de volver a un torneo continental está cada vez más cerca, pese a lo mal que juega el equipo. Después se verá cómo se refunda el plantel.
Boca no jugó para nada bien. No tuvo fútbol ni peligrosidad ofensiva en el primer tiempo (excepto por el chico Acosta, que pegó un tiro en el palo) y sufrió horrores en defensa. Lo salvó una vez más Agustín Orión, que le tapó un claro cara a cara a Nahuelpán y un tiro libre venenoso a Pérez García. El problema de Boca no está en la defensa, sino en el retroceso, y no lo pagó yéndose derrotado al descanso porque lo que le sobra es arquero. Además, con la salida de Gigliotti, tuvo más anemia ofensiva que la que acostumbra. ¿Qué mérito deportivo hizo Riaño para ser titular? Por favor, es impresentable. No aguanta la pelota, tira masitas al arco y es un autito chocador. Basta de este pibe. Gigliotti es Batistuta al lado de él.
En el complemento, ya Tigre no llegó tanto, pero la falta de fluidez ofensiva y de circulación de Boca, fue exasperante. Para colmo, Bianchi le erró con los cambios, sacando al pibe Acosta (lo mejor del equipo), dejando a Riaño los 90 minutos no se sabe para qué, y metiendo al otro impresentable de Ledesma para sacar a Erbes. Parecía que se moría en un 0-0, porque el local ya no exigió tanto a Orión. Pero...a los 45 minutos, el 10 frotó la lámpara. Riquelme recibió en tres cuartos, apuntó y midió el remate que se clavó a media altura del palo derecho de Javi García, que nada pudo hacer. Justo cuando los dirigentes dudan de renovarle su contrato. No se sabe qué será de la vida de Román a partir de junio. Y es cierto que físicamente ya no es el de antes. Pero todavía puede hacer cosas propias de sus mejores tiempos, como su golazo de anoche.
Boca volvió al triunfo, clave en su lucha para clasificar a la Copa Sudamericana. Está lejos en el torneo, pero el objetivo de volver a un torneo continental está cada vez más cerca, pese a lo mal que juega el equipo. Después se verá cómo se refunda el plantel.
lunes, 14 de abril de 2014
Colón 0- Boca 0
El equipo de Bianchi dejó escapar el último tren para pelear el título y no pudo con el Sabalero.
No hay mucho para rescatar del partido. Colón, un equipo muy consciente de sus limitaciones, planteó dos líneas de cuatro combativas y apostó a no perder. Es lógico, está peleando por no descender. Y Boca no supo quebrarlo, por falta de fútbol, y también por falta de actitud de algunos de sus jugadores, como Gago y Sánchez Miño. El equipo de Bianchi generó más peligro en el ST con el ingreso de Acosta, pero no tuvo punch arriba, ni ideas futbolísticas concretas. Eso sí, a lo último no le cobraron un penal grande como una casa por un manotazo de Sosa ante un tiro libre de Colazo. El local casi no exigió a Orión. Resignó el liderazgo del torneo, pero sumó un punto que le sirve en su lucha por la permanencia.
A Boca sólo le queda clasificar a la Copa Sudamericana. Después, deberá haber una limpieza a fondo.
No hay mucho para rescatar del partido. Colón, un equipo muy consciente de sus limitaciones, planteó dos líneas de cuatro combativas y apostó a no perder. Es lógico, está peleando por no descender. Y Boca no supo quebrarlo, por falta de fútbol, y también por falta de actitud de algunos de sus jugadores, como Gago y Sánchez Miño. El equipo de Bianchi generó más peligro en el ST con el ingreso de Acosta, pero no tuvo punch arriba, ni ideas futbolísticas concretas. Eso sí, a lo último no le cobraron un penal grande como una casa por un manotazo de Sosa ante un tiro libre de Colazo. El local casi no exigió a Orión. Resignó el liderazgo del torneo, pero sumó un punto que le sirve en su lucha por la permanencia.
A Boca sólo le queda clasificar a la Copa Sudamericana. Después, deberá haber una limpieza a fondo.
lunes, 7 de abril de 2014
Boca 3- Godoy Cruz 0
Y un día volvió a la victoria. Tras las dos derrotas consecutivas ante River y Central, el conjunto de Bianchi goleó al Tomba y tendrá una semana de paz, por fin.
El partido lo abrió enseguida. A los 8 minutos, Riquelme le puso una bola genial al Burrito Martínez y el arquero Carranza se lo llevó puesto. Penal que el 10 cambió por gol. Después, Boca se retrasó peligrosamente y le cedió terreno y pelota a un Godoy Cruz que, si ganaba quedaba puntero del campeonato. Claro que exigió muy pocas veces a Orión, no generó peligro.
En el complemento, de movida entró Erbes por un cada vez más inexpresivo Gago, y enseguida, en el momento menos pensado, clavó el segundo: Forlín salió jugando y se la dio a Martínez, con todo Godoy Cruz jugado en ataque. Éste habilitó a Gigliotti, quien (ayudado por Carranza, que le regaló todo el arco) eludió al golero mendocino y decretó el 2-0.
A partir de ahí, el partido fue otro. Boca impuso el ritmo de la mano de Riquelme y hasta se floreó, generando varias chances claras. Restaba el tercer gol: Carranza cometió otro penal (esta vez a Colazo, de muy buen partido), lo echaron y el 10 se lo cedió al Puma, quien no falló. 3-0. No había tiempo para nada más.
Boca volvió al triunfo, y en este campeonato de locos, se ubica seis unidades abajo de los punteros Colón y San Lorenzo, que serán sus próximos rivales. Obviamente, no muestra cosas de un equipo campeón, pero si lograse ganar tres partidos seguidos, todo puede pasar en este loco fútbol argentino. Mientras tanto, tendrá paz hasta el domingo. Y eso no es poco, para nada.
El partido lo abrió enseguida. A los 8 minutos, Riquelme le puso una bola genial al Burrito Martínez y el arquero Carranza se lo llevó puesto. Penal que el 10 cambió por gol. Después, Boca se retrasó peligrosamente y le cedió terreno y pelota a un Godoy Cruz que, si ganaba quedaba puntero del campeonato. Claro que exigió muy pocas veces a Orión, no generó peligro.
En el complemento, de movida entró Erbes por un cada vez más inexpresivo Gago, y enseguida, en el momento menos pensado, clavó el segundo: Forlín salió jugando y se la dio a Martínez, con todo Godoy Cruz jugado en ataque. Éste habilitó a Gigliotti, quien (ayudado por Carranza, que le regaló todo el arco) eludió al golero mendocino y decretó el 2-0.
A partir de ahí, el partido fue otro. Boca impuso el ritmo de la mano de Riquelme y hasta se floreó, generando varias chances claras. Restaba el tercer gol: Carranza cometió otro penal (esta vez a Colazo, de muy buen partido), lo echaron y el 10 se lo cedió al Puma, quien no falló. 3-0. No había tiempo para nada más.
Boca volvió al triunfo, y en este campeonato de locos, se ubica seis unidades abajo de los punteros Colón y San Lorenzo, que serán sus próximos rivales. Obviamente, no muestra cosas de un equipo campeón, pero si lograse ganar tres partidos seguidos, todo puede pasar en este loco fútbol argentino. Mientras tanto, tendrá paz hasta el domingo. Y eso no es poco, para nada.
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