Fue todo el partido igual, muy luchado, muy trabado y con poquísimas situaciones de gol. Quiero destacar la actuación de la defensa, principalmente de la zaga central López- Alonso. De Lisandro no descubro nada, todos sabemos de su jerarquía, pero lo del paraguayo es destacable. No se pone colorado si tiene que reventarla, muestra fiereza en cada cruce y si puede es capaz de poner una pelota en profundidad como en el primer tiempo. No estaría mal dejarlo de 6, teniendo en cuenta que Izquierdoz no lo es y le cuesta cerrar para ese lado. Después Buffarini y Nández mostraron los huevos de siempre. Obando con ganas por la izquierda, Tevez muy activo, lúcido y picantísimo, lástima que los delanteros no aprovecharon sus pases filtrados. Pavón alternó buenas con malas, aunque mostró sacrificio. En el segundo tiempo entraron Villa y Zárate, pero no lograron desequilibrar. Faltó punch.
Lo de Benedetto hace rato que es preocupante. Yo sé que no está diez puntos en lo físico, pero eso no es impedimento para que cometa errores de principiante. Manejar pésimo las contras, pivotear para cualquier lado y generar un contragolpe del rival y con una alarmante falta de confianza para apuntar al arco: las dos que tuvo se le fueron por arriba. Pero más allá de eso, lo noto con una displicencia y una dejadez exasperante. Encima se pelea con los rivales. Pipa, te quiero y te voy a querer siempre, pero poné un poco de ganas, dejate de hinchar las pelotas. Si te querés ir a Europa, cosa que me parece comprensible, ya que tenés 29 años recién cumplidos y nunca tuviste esa oportunidad, decíselo al presidente y al manager. Y listo, buscamos otro 9, o apostamos por uno de la Reserva. Tratá de levantar el nivel por lo menos en lo que resta de esta copa, y si pasamos a la final, también.
En fin, creo que el empate es justo, aunque me queda la sensación de que lo podríamos haber ganado. Creo que se dejó una mejor imagen, a tal punto que este debe haber sido el partido en el que menos le llegaron a Andrada, que de todas formas se mostró siempre seguro. Ahora, con una semana sin partidos en el medio de cara a la revancha, tenemos la gran posibilidad de cantar victoria en la Bombonera, con más oxígeno (o más nafta para el Falcon). Y yo sé que lo vamos a ganar, aunque sea un partido jodido. En la final esperará seguramente Tigre, que ayer goleó 5-0 a Atlético Tucumán. Habrá que cuidarse de no recibir goles, pero no tengo dudas de que en la revancha nos imponemos. ¡Vamos Boca!
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| Argentina- Diario AS |
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